La web es una parte esencial de nuestra vida cotidiana, pero ¿alguna vez te has preguntado cómo funciona? En este artículo vamos a profundizar en la arquitectura de cliente-servidor que la sustenta.
Arquitectura de cliente-servidor
La web funciona con una arquitectura de cliente-servidor. Esto significa que, en términos simples, tu computadora es el cliente y del otro lado hay un servidor que almacena la página web y te entrega la página, aplicación, recurso que estás solicitando. El servidor aloja el contenido de la web y maneja la lógica de la aplicación, procesando las solicitudes del cliente y enviando la información solicitada.
El proceso de solicitud y respuesta es crucial en esta arquitectura: el cliente hace una petición al servidor, y este último (el servidor)te envía una respuesta. Esta conexión se realiza a través de internet, por lo que se necesita una conexión a internet para que la web funcione.